¿Qué es el resfriado común?
El resfriado común se define como un trastorno catarral de las vías respiratorias altas, que se caracteriza por coriza aguda, febrícula, escalofríos, congestión nasal, estornudos y también puede ir asociada a sed, malestar general, sudoración, enrojecimiento de la piel, ojos vidriosos y extremidades frías.
Estos virus aparecen especialmente activos en las épocas estacionales de bajas temperaturas, ya que se ha comprobado que la vasoconstricción nasal y la bajada de temperatura corporal (también por enfriamiento en los pies) predispone a padecer el resfriado común.
Además, se ha comprobado que los niños sufren con mayor prevalencia el resfriado, asociándose a coinfecciones o infecciones secundarias que pueden cursar con otitis y sinusitis más frecuentemente. Los aceites esenciales nos pueden beneficiar, y en este caso también a los más pequeños de la casa.
¿Cómo nos puede ayudar la aromaterapia?
Sabemos que existen moléculas bioquímicas en el mundo de la aromaterapia muy potentes y, por supuesto, no todas ellas serán adecuadas para el uso de los más peques. Afortunadamente tenemos unos cuantos aceites esenciales que, utilizados en las dosificaciones y por las vías de administración adecuadas, se pueden utilizar con seguridad.
Cabe destacar la importancia de la calidad de los aceites esenciales que vamos a utilizar en la difusión atmosférica, ya que deben ser aceites esenciales de máxima calidad, puros, íntegros y naturales. Esto debe indicarse en la información del estuche y la etiqueta: el nombre botánico, el origen, la parte de la planta destilada o prensada (esencias) y las moléculas más destacadas, siendo de elección siempre que sea posible los que provengan de cultivos ecológicos.
La selección del difusor también resulta de interés ya que, por ejemplo, en el caso de nuestro aromadifusor Océlia, la difusión de los aceites esenciales será mediante vapor de agua por ultrasonidos, un tipo de difusión que nos aportará humedad, muy adecuada en ambientes secos por bombas de calor o aires acondicionados por ejemplo.
Recomendaciones de uso para la correcta utilización de la aromadifusión en la infancia
1. Se desaconseja el uso de aceites esenciales en niños menores de 3 meses.
2. En el caso de mayores de 3 meses a 3 años de edad, se recomendará la utilización de 3 gotas de aceite esencial en difusor-humidificador (Océlia) en 15 minutos cada hora o 2 minutos por hora de aromadifusión nebulizador (Libelia).
3. En el caso de niños de 4 a 6 años, se puede aumentar la dosificación a 5 gotas en 15 minutos cada hora en Océlia o 5 minutos cada hora en Libelia.
4. El aromadifusor permanecerá apagado durante las horas de descanso.
5. Pediremos consejo a un experto para que nos asesore siempre antes de utilizar los aceites esenciales así como las dosificaciones necesarias.
Esta es nuestra propuesta para mayores de 3 meses en la prevención y convalecencia del resfriado común: info@terpenic.com o de instagram.com/terpenic
Añadir en un frasco de cristal topacio con gotero de 10ml:
Aceite Esencial de Tomillo Linalol – 0,5 ml
Aceite Esencial de Saro – 3ml
Aceite Esencial de Árbol del Té – 3ml
Aceite Esencial de Limón – 1ml
Aceite Esencial de Mandarina Roja – 2,5ml
Nota: Esta sinergia se difundirá siguiendo las recomendaciones de uso citadas anteriormente en el caso de utilizarse en estancias donde estén niños menores a 6 años.
Propiedades de los ingredientes utilizados
1. Tomillo Linalol (Thymus vulgaris) De él obtenemos el alcohol terpénico Linalol entre el 30 y el 45%, y del cual destacamos sus propiedad calmante de las mucosas respiratorias.
2. Saro (Cinamosma fragans). Nos ofrece el óxido terpénico 1,8-Cineol del 30 al 50%, del que destacamos su efecto inmunoestimulante.
3. Árbol del Té (Melaleuca alternifolia). Recibimos el terpinen-4-ol, un alcohol terpénico que contiene entre el 30 y el 48%, y destacamos su efecto antiséptico de amplio espectro.
4. Limón (Citrus limonum). El limoneno es el terpeno que contiene mayoritariamente de 60 a 70% y destacamos su utilización como desinfectante ambiental.
5. Mandarina Roja (Citrus reticulata). De él obtenemos el terpeno denominado gamma-terpineno (de 16 a 22%) y destacamos su actividad antioxidante.
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